Según una encuesta realizada por el periódico británico The Daily Mail, el 80% de las parejas se van a dormir sin darse un simple beso de buenas noches. En una relación de largo plazo, con el tiempo, la rutina se convierte en algo inevitable. Según la misma encuesta, las parejas que no se besaron antes de acostarse también eran las que dormían de espaldas uno con otro.

Lo importante es no dejar la calidez y el afecto en segundo plano. Antes de que tu relación pierda la gracia, conoce estas tres lecciones que te ayudarán a reencender la llama entre los dos:

1 – Saca la televisión del cuarto

Si es para ver una película abrazados bajo las cobijas, adelante, pero en otras circunstancias la televisión puede ser enemiga de la intimidad.

El hábito de ver la televisión antes de dormir, además de reducir la calidad del sueño, dificulta el diálogo en la pareja y propicia olvidar el beso de buenas noches, ya que cada quien se duerme en momentos diferentes. Por lo tanto, la televisión mejor va en la sala.

2- El trabajo tiene límite

En un mundo perfecto, volverías a casa y tendrías todo el tiempo disponible para atender a tu pareja. Pero la realidad no siempre es así. Hoy en día, el trabajo absorbe incluso el tiempo personal, especialmente si tú manejas tu propio negocio. Sin embargo, el sentido común debe ayudarte a saber cuándo dejar de trabajar y debe darle al otro comprensión para cuando se requiere tiempo extra.

3- Todos los días un detalle

Un “buenos días” o un beso de buenas noches. Gestos sencillos que mantienen vigente la atención de la relación. Esta muestra de afecto es simple, pero significa mucho.