Este sentimiento de cuerpo cortado que nos da cuando tenemos gripa es lo peor de la enfermedad. Con tos y flemas somos personas funcionales, pero cuando te duele el cuerpo todo lo que quieres es echarte en un sillón cómodo y no mover más que el dedo para cambiarle a la televisión.
Para deshacerte de ese horrible síntoma encontramos un remedio casero que puedes aplicar. El único problema es que necesitas tener una tina para hacerlo.
Llena la tina de agua caliente. Agrega 50 gramos de jengibre rallado y métete al agua por 30 minutos. En muy poco tiempo vas a empezar a sentir cómo las toxinas se salen de tu cuerpo. Aunque el agua no esté muy caliente vas a sentir que te hace sudar. Recuerda tomar mucha agua una vez que te salgas de la tina (y enjuágate bien).
Vete a la cama inmediatamente después. Vas a dormir mucho mejor y al día siguiente te sentirás más descansada. Si te sigues sintiendo mal al día siguiente lo puedes repetir.
Si te pica la piel te recomiendo que te enjuagues inmediatamente porque puedes ser alérgica al gengibre.
Si no tienes acceso a una tina puedes hervir agua con jengibre y respirar el vapor (también ayuda) y después colar esa agua, agregar una cucharada de miel y tomarla como té.
¡Si lo intentas cuéntanos cómo te fue!
Fuente: (Actitud Fem)