El último pero no el menos importante de los tres registros, este se usa para designar todo lo que tiene que ver con la imaginación, viene de imago, imaginar o sea la capacidad del sujeto para representar cosas en el pensamiento, este sería el noúmeno Kantiano.
Para Lacan tiene relevancia a partir de 1936, en el que lo utiliza para desarrollar su teoría del estadio del espejo, es fundamental para la constitución del yo (moi) que en la teoría Lacaniana es diferente del yo (je) de la enunciación.
En el estadio del espejo el sujeto antes fragmentado en su propia concepción se concibe como un ente diferenciado de la madre y de los otros objetos y crea una imagen propia, una representación de sí mismo, que le permitirá relacionarse con el entorno.
Podríamos pensar que el registro Real es la silla objeto existente, el registro Simbólico es el significante, la palabra “silla” que hace referencia al referente objeto, y lo Imaginario, la representación mental que el sujeto humanos hace del objeto silla.