Si alguna vez te haz roto un hueso, entones sabrás lo terrible que son los yesos tradicionales. Tras una semana empiezan a oler mal y pican más que si tuvieras el brazo cubierto de ronchas. La tecnología podrá volver estos viejos yesos obsoletos.
Unos moldes hechos con impresoras 3D podría aliviar el mal olor y la comezón que causan los yesos tradicionales. Un estudiante turco, Deniz Karasahin, ya llevó la idea un paso más adelante. El prototipo del molde Osteoid de Karasahin usa pequeñas vibraciones ultrasónicas para apresurar el proceso de enmendadura de los huesos por un 40%.
Las capacidades de enmendar huesos de pulsaciones de ultrasonido de baja intensidad (LIPUS en inglés) han sido conocidos por una décadas, pero es difícil llevar a cabo el tratamiento porque requiere que se coloque plomo de ultrasonido sobre la piel directamente arriba de dónde esta fracturado el hueso. Con el yeso tradicional esto es imposible, pero con el nuevo modelo, hay varios huecos alrededor que dan acceso a la piel. El diseño permite que estos plomos se pongan directamente en el molde.
Aún sólo es un prototipo, pero dado el acelerado ritmo en el cual las tecnologías de impresión 3D están avanzando, podríamos ver a gente con este tipo de molde sobre sus fracturas a partir de dentro de un año o dos.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.