Sean Huolihan no es el primer soldado que pasa su tiempo al otro lado del charco mirando a través de su cámara en lugar de un rifle. Pero estas fotos tienen una cualidad que no sueles ver en fotos de guerra.
Huolihan ha sido un miembro de la guardia nacional por más de siete años, pero su servicio tomó un giro ineseperado cuando agarró una cámara por primera vez. Cuando lo mandaron a Afganistán fue el historiador voluntario de su unidad.
Las imágenes que trajo de regreso son más artísticos que documentales. Aquí hay unas de sus mejores tomas:
Publicado por Othón Vélez O’Brien.