Sabemos que ciertos alimentos nos pueden dejar hinchados, como alimentos bien salados y bebidas carbonatadas. Pero resulta que ciertas combinaciones de comida tienen un efecto similar.

Lácteos + almidón
Pizza caería en esta categoría. También bagels con queso-crema. Los lácteos tardan en digerir, luego si agregas almidón a la ecuación y tarda aún más. Esto es un problema porque el almidón comienza a fermentarse cuando pasa mucho tiempo en el sistema digestivo y esto provoca gases dolorosos.

En lugar deberías eliminar el pan y comer queso con comida verde amarga, como la arugula. Comer alimentos amargos hace que produzcas bilis y te ayuda a digerir grasas mucho mejor. También busca quesos de cabra o cualquiera que sea más fácil de digerir.

Fruta + proteína o almidón
La fruta contiene azucares simples que requieren muy poco tiempo para digerir, significando que no permanecerán en tu estomago por mucho tiempo, al menos bajo circunstancias normales. Pero cuando los consumes con una proteína como en los huevos o justo después de comer como postre, ese no es el caso. Lo que sucede es que el azúcar de la fruta permanecerá demasiado tiempo en tu estomago, hasta que se termine de descomponer la proteína.

Para evitar esto, come la pura fruta sin acompañar o espera mínimo una hora después de comer. Así, tu estomago tiene la oportunidad de digerir el resto de la comida y la fruta se procesará rápidamente como se debe.

Proteína + proteína
La proteína toma mucha energía  para procesar. Así que en general, las combinaciones de alimentos altos en proteína con otros iguales no son buena idea.

Opta por una sola proteína por almuerzo. Alimentos verdes y sin almidón pueden acompañar casi cualquier alimento.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.