Puede que sientas que encontraste al amor de tu vida, incluso puede que ya te encuentres en una relación larga y sana. Pero si realmente quieres que dure tu conexión, hay ciertos comportamientos en la relación que deberías de evitar o al menos mantener a un mínimo.

Aquí hay 5 comportamientos en una relación que deberías de evitar si quieres que te dure:

Ser demasiado dependiente

Las relaciones debes ser nutridas, no pueden florecer si los dejas solos. Tu relación debería de ser una de tus prioridades en la vida. Claro, no debería ser tu única prioridad. Si no te sientes cómodo haciendo planes que no requieran la participación de ambos hasta que estés seguro que tu pareja no tiene planes, puede que estés dándole demasiada importancia a la relación. Esta es una clase de comportamiento dependiente común. Otra es no estar dispuesto a que tu pareja haga cosas por su cuenta o que no respetes su necesidad de tener tiempo a solas.

Ser demasiado independiente

De la misma manera que hacer que toda tu vida gire en torno de tu relación no es sano, tampoco es no darle un poco de prioridad. Si siempre exiges que las cosas sean a tu manera, limitas la libertad de tu pareja de manera no razonable. En una relación hay que saber cuándo ceder. Claro, algunos valores clave no deberían de ser sacrificados, si uno de los dos quiere hijos y el otro no, esto puede volverse un valor no negociable.

Pero en la mayoría de los casos, necesitas aceptar que no puedes tener todo como lo quieres. Si tienes diferentes preferencias de comida, por ejemplo, necesitas aceptar la derrota de vez en cuando. Lo mismo aplica para la toma de decisiones. Mientras que algunas decisiones son tuyas, otras deben hacerse juntos en pareja, como qué planean hacer durante sus vacaciones juntos.

No estar dispuesto a sacrificar

Estar en una relación inevitablemente requiere que hagas algunos sacrificios. No puedes vivir tu propia vida y estar en una relación comprometida a la vez. Todo trata de llegar a acuerdos razonables entre los dos para satisfacer los deseos y las necesidades de cada uno. Si se ponen de acuerdo con que se avisen cuando uno vaya a regresar tarde a la casa, entonces no puedes salir y no regresar sin avisarle a tu pareja.

Puede que no te guste sacrificar parte de tu autonomía, pero desafortunadamente, las relaciones no funcionan si no estás dispuesto a sacrificar un poco tus deseos y preferencias.

No estar dispuesto a comunicar las cosas que te molestan

No existen dos personas con exactamente las mismas preferencias, comportamientos y manerismos. Es muy probable que algo de esto en tu pareja te moleste a ti, especialmente después de la etapa de luna de miel de la relación.

Sin embargo, algunas parejas no pueden comunicar ninguno de sus disgustos con tu pareja de manera sana. Dejan que la molestia se acumule hasta estallar o dejan salir su frustración durante una discusión.

Es importante para el éxito de cualquier relación poder comunicarte sobre las cosas que te molestan de tu pareja sin ofender. De la misma manera debes aprender a escuchar cuando tu pareja te expresa lo mismo.

Explícita o implícitamente fomentas la inequidad

Aunque estemos en pleno 2018, todavía hay problemas de estereotipos y papeles de género, pero la equidad es esencial para tener una relación duradera. Si ambos tienen trabajos de tiempo completo, deberían de contribuir de manera equitativa en el quehacer de la casa.

Algunas parejas se dan cuenta que pueden dividir estas tareas de manera que tenga sentido, conformándose a los horarios de los dos.

Pero la equidad va más allá de todo esto. Las decisiones que afecten a los dos de manera importante deberían de tomarse juntos. Lo mismo aplica en la cama, todo lo que tenga que ver con sexo debe ser discutido, como sus necesidades y deseos sexuales.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.