Es necesario acudir consistentemente al ginecólogo para tu bienestar, pero no es lo más divertido del mundo. Además de “de verdad no quiero estar aquí,” hay muchas cosas que pasan por la cabeza de una mujer durante su visita al ginecólogo.
Aquí hay unos de los pensamientos más comunes que pasan por la cabeza de las mujeres mientras están visitando al ginecólogo:
1. “A esta sala de espera le urge una remodelación”
Con las revistas viejas, uno siempre se siente que viajó al pasado en la sala de espera de los doctores en general.
2. “Nunca me he sentido tan fría y vulnerable”
Ese momento cuando no tienes puestos los pantalones y tienes la bata que te dieron y miras dónde vas a tener que poner los pies puede ser de los momentos más incómodos en la vida, después de el momento que tienes que subirte a ese aparato. Además la temperatura podría estar un poco más elevada en el consultorio.
3. “No quiero esa cosa cerca de mi vagina”
Todas las herramientas del ginecólogo parecen que están hechos para torturar a la gente. A veces es mejor ni ver qué es lo que está agarrando el doctor para no empeorar la ansiedad.
4. “Por favor no me hagas la plática antes ni durante la inserción”
Está bien responder las preguntas del doctor sobre tu salud, incluso se puede hablar de nuestras familias, trabajo, mascotas, etc, pero es mejor dejar eso para cuando no te estás preparando para recibir un aparato o mientras están mirando dentro de ti para procurar que todo esté en orden. Lo único que quiere una mujer decir en este momento es “¿ya casi terminamos?”
5. “¿Cómo huelo?”
Probablemente ya esté acostumbrado a todos los olores que existen allá abajo, pero aún así tratas de tener un poco de consideración y quieres que todo esté super fresco. Pero cualquier cosa puede pasar desde tu último baño hasta el consultorio, entonces no puedes evitar pensar en estas cosas.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.