Cuando te da sed, la solución es fácil, ¿no? Simplemente tomas un vaso de agua y evita comida salada. Pero si te pasa algún día que no importa cuánta agua tomes, sigues teniendo sed, tu cuerpo podría estarte alertando de otra cosa que podría estar pasando.

Pensarás que se trata de deshidratación, pero pueden haber varias otras razones por las cuales puedes sentir esa sed insaciable. Si esto te pasa con frecuencia, definitivamente deberías de consultar a un doctor. Siempre que vayas al doctor, deberías de decirle si sueles pasar sed mucho tiempo porque esto puede ser síntoma de cualquiera de estas cosas:

Diabetes tipo 1 o 2

La condición más comúnmente asociada con la sed en exceso es la diabetes. Tanto la diabetes tipo 1 y 2 pueden hacer que le cueste trabajo a tu cuerpo controlar los niveles de glucosa en la sangre. Esto causa que tus riñones produzcan más orina para eliminar la glucosa, causando deshidratación, provocándote esa sed que no logras saciar.

Diabetes insipidus

Aunque no está relacionado con los tipos 1 y 2 (también conocidos como diabetes mellitus), la diabetes insipidus comparte algunos de los síntomas, incluyendo la sed extrema y las constantes visitas al baño. Normalmente tus riñones se encargan de eliminar los fluidos excesivos de nuestra sangre, moviéndolos a la vejiga. Por otro lado, cuando tu cuerpo pierde agua, ya sea sudando o cómo sea, tus riñones conservan el fluido  producen menos orina. Con la diabetes insipidus, tus riñones no pueden retener el líquido. Aunque haya una caída en el fluido en general alrededor del cuerpo, los riñones continúan produciendo mucha orina, resultando en un empeoramiento de la deshidratación, por lo tanto mayor sed.

Baja presión

Muchos expertos creen que el estrés crónico puede causar que las glándulas suprarrenales funcionen con menor eficacia, disminuyendo la presión sanguínea y resultando en sed. Cuando disminuye la presión arterial, el cuerpo recibe una señal del cerebro para beber más. Beber más agua ayuda a mantener correcta tu presión arterial.

Anemia

La pérdida de sangre (digamos si te baja mucho durante tu regla) es una de las causas más comunes para la anemia. Cuando pierdes mucha sangre, el cuerpo puede perder suficientes glóbulos rojos en el proceso como para causar anemia, al igual que acabar con los niveles de fluido en tu cuerpo, causando mayor sed.

Boca seca

Algunas personas sufren de una condición conocida como xerostomía, la cual se manifiesta con una sed anormal. Suele ocurrir con el envejecimiento y cambios hormonales y suele ser tratado al mantenerte hidratado y evitar cualquier cosa que podría secar más tu boca, como la cafeína o el alcohol. Ciertos medicamentos pueden causar esta condición, como los antidepresivos, medicamento para la presión arterial y antihistamínicos.

 

Publicado por Othón Vélez O’Brien.