¿Alguna vez te han dicho que tienes un problema de ira? De ser así, ¿te hizo enojar?

¿Y por qué debería eso importarle a nadie más? Es tu vida, fin y al cabo, ¿no? Pues claro, tú decides cómo reaccionar y cómo comportarte, pero tu comportamiento afecta a los que te rodean también. Te justificarás diciendo que eres pasional y que estas en tu derecho de enojarte cuando se te pegue la gana. No es un delito, pero la expresión negativa de el enojo podría resultar en un delito.

La ira es un problema humano, por lo tanto no se limita a edad, género ni raza. Y por supuesto, todos nos enojamos de vez en cuando, pero no todos tienen un problema de ira.

Ahora, es una cosa que alguien te diga que tienes un problema de ira, pero es otra cosa totalmente distinta cuando admites que tienes este problema. Así que aquí hay unas señales que indican que tienes un verdadero problema de ira:

1.  No aceptas la crítica

La gente con problemas de ira son aquellos que no pueden escuchar una crítica constructiva. Se ponen a la defensiva rápido y atacan a quien esté tratando de ayudar.

2. Siempre tienes que ganar las discusiones

Aquellos que no pueden controlar su ira siempre tienen que tener la última palabra y por nada en el mundo se retractarán. El argumento se deja de tratar del problema y se convierte en una pelea por dominar el argumento.

3. Tienes la mecha increíblemente corta

La gente iracunda tienen muy poca paciencia y con frecuencia explotarán por la más mínima provocación. No poder controlar estos impulsos es indicativo de que tienes un problema.

4. Eres rencoroso

Guardar todos los rencores y la amargura en tu vida sin tolerancia a la gracia es otra indicación de que tienes un problema grave. Si no puedes perdonar y siempre estas a la ofensiva, no tienes control sobre tu ira.

5. Otros dicen que tienes un problema con la ira

La mayoría de la gente se enoja, pero no a todos se les dice que tienen un problema de ira. Si gente cercana a ti te comenta que podrías tener un problema de ira, puede que tengan razón. La gente no llega y te dice al azar “oye, tienes un problema con tu enojo,” es probable que tienen alguna evidencia que les hace decirte sobre tu ira. Escucha a esta gente.

Entiendo, no quieres que te digan que tienes un problema. Es mucho más fácil pensar que no es problema tuya, sino de ellos. El problema aquí es que si la gente te esta diciendo que tienes un problema y niegas o ignoras las sugerencias de conseguir ayuda, entonces algún día te encontrarás completamente solo, porque nadie quiere estar cerca de alguien que siempre esta enojado.

La ira suele ser una expresión externa de algún problema frecuentemente oculto. El enojo es lo que todos los demás ven, pero los problemas subyacentes no son fácilmente vistos. Es por esta razón que los bullies suelen haber sufrido de bullying también. Sienten dolor y convierten ese dolor en ira hacia otros.

Aquí es dónde tienes que verte bien en el espejo y preguntarte lo siguiente:

¿Tienes un problema de ira?

Publicado por Othón Vélez O’Brien.