Un eructo básicamente es aire escapando de tu estomago, lo cual es bueno porque te mantiene cómodo y significa que tu sistema digestivo está haciendo su trabajo.

Pero si estás eructando en exceso o si vienen con otros síntomas extraños, podría ser señal de que algo anda mal con tu cuerpo.

¿Cuánto sería considerado eructar excesivamente? Si estás eructando al grado que se vuelve molesto y te pasa tres días o más a la semana, es momento de ir al doctor.

La aerofagia, o tragar aire, es la causa más común de eructos excesivos. Es tan común que probablemente ni te has dado cuenta cuando lo haces, como cuando tomas refresco o masticas chicle. El aire puede quedar atrapado en tu esófago y estomago y termina saliendo de algún modo.

Esto no significa que estés enfermo, es una condición que se puede resolver cambiando unos hábitos como tomar menos refresco o masticar con la boca cerrada. Eructar en si casi nunca es señal de una enfermedad.

Pero sí hay ocasiones en donde los eructos recurrentes podrían indicar algo más grave, especialmente cuando viene con otros síntomas. Estos síntomas junto con tus eructos deberían de darte razón para visitar al doctor pronto:

Vomitas repentinamente

Si tus eructos vienen repentinamente y de la nada y vienen acompañados de náusea y mucho vómito, puede ser señal de algo muy grave que podría poner tu vida en peligro.

Si no logras mantener nada de comida dentro de tu y tu estómago está distendido y duele, puede significar que tienes un bloque u obstrucción intestinal. En este caso deberías ir a la sala de urgencias inmediatamente.

También podría ser señal de gripe estomacal, una infección o incluso cáncer.

Te sientes muy hinchado

Un estómago hinchado puede suceder si tragas mucho aire, pero si estás muy hinchado y duele, puede ser otro síntoma de una obstrucción. Si los remedios normales no te dan alivio o si empiezas a vomitar, deberías de ir a una consulta inmediatamente.

El hinchamiento no siempre es algo grave, también puede suceder en personas con síndrome de intestino irritable o intolerancia a la lactosa, dos condiciones conocidos por causar que la gente eructe.

Sientes un dolor agudo en tus costillas

Una hernia hiatal es cuando tu estómago se hincha hasta tu esófago, esto puede causar eructos recurrentes. En sí, no es razón para la sala de urgencias, pero sí puede ser muy incómodo.

También existe el riesgo que la hernia se “estrangule”, cortando el suministro de sangre al resto del abdomen. Esto requiere de una cirugía de emergencia y puede ser mortal sin tratar.

Te arde la garganta

Si eructas después de comer y se saben a ácidos gástricos y sientes un ardor en el pecho, puede tratarse de un reflujo. Eructos asociados con reflujo deberían ser atendidos. No es bueno tener reflujos frecuentes y puede caerle pesado al esófago.

Bajas de peso sin intentar

Bajar de peso rápidamente junto con eructos recurrentes es otra señal de un bloqueo intestinal.

Sin embargo, si bajas de peso lentamente y no lo estás intentando, puede ser señal de que no estás digiriendo bien tu comida y deberías de acudir al doctor para encontrar la razón.

Tu sistema digestivo no está funcionando normalmente

Cuando eructas mucho junto con otros síntomas gastrointestinales, incluyendo diarrea, estreñimiento y flatulencias, puede indicar condiciones como síndrome de intestino irritable, intolerancia a la lactosa o sensibilidades a ciertos alimentos.

Apunta todos tus síntomas en una lista, aunque te den pena, para dárselas a tu doctor cuando vayas a la consulta.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.