Cuando se trata de cuidar y mantener tu vello corporal, es bueno que sepas lo que estás haciendo, especialmente cuando se trata de zonas más delicadas, como entre tus piernas.

Cuando quieres controlar y eliminar el vello púbico, el error más mínimo puede meterte en una situación muy incómoda o dolorosa. Así que antes de que decidas sacar el rastrillo o lo que vayas a usar, es una buena idea que sigas estos consejos si eres un hombre que no quiere estar bien peludo de todos lados.

Asígnale sólo un uso a tus herramientas

Si estás usando una tijeras para cortarte los vellos, úsalos únicamente para eso, no vayan a ser las mismas tijeras que usas para la cocina, la cabeza o para tus manualidades.

Existen ciertos tipos de bacteria que viven entre tus piernas y no quieres que estén en otras partes de tu cuerpo. De lo contrario, podrías adquirir algún hongo, infección o lo que sea.

Y antes de empezar con las tijeras, es bueno tallarlas con un poco de alcohol y lavar tus manos antes de usar algo filoso en tus áreas más sensibles.

Prepara el terreno

Si lo que buscas es eliminar por completo el pelo, es bueno que prepares el terreno con el que vas a trabajar primero. No quieres empezar con el rastrillo de entrada al menos de que quieras irritar tu piel o posiblemente cortarte.

Lo primero que debes hacer es recortar todo el pelo que planeas rasurar. Trata de no hacerlo hasta la superficie de la piel para evitar pelos enterrados.

Usa agua caliente

Rasurarte con el pelo seco es mala idea. Lo mejor es esperar a después de un baño caliente para rasurarte el vello corporal. Esto facilitará el proceso y cuidará más tu piel. Esto ayuda porque se suaviza la piel y se afloja la mugre y el aceite en la piel, además, el agua puede servir como lubricante natural para evitar que se jalen los pelos.

Procura usar gel para rasurar en lugar de jabón, te brindará más humectación.

Rasura de la forma correcta

Si lo que buscas es estar perfectamente liso, necesitas rasurarte en la dirección correcta, no contra el grano. Sólo fíjate en qué dirección está apuntando el pelo y rasúrate en la misma dirección.

Esto ayudará a evitar la piel rasposa y pelo enterrados. Este método también es menos probable de causar irritación ya que los pelos no son jalados en la dirección a la que no están acostumbrados.

Usa mucha precaución alrededor de los testículos

No debería de sorprenderte que está zona requiere más cuidado y atención. Está zona atrae a muchas bacterias, así que si te cortas por error, es muy probable que se infecte. Vas a querer usar tu mano dominante para estirar la piel antes de usar cualquier cosa filosa aquí.

Limpia la cortada

Aunque tengas mucho cuidado, es muy posible que te termines cortando. Si te cortaste, que no te gane el pánico, procura limpiar el área con jabón y agua caliente y alcohol. Si se trata de una cortada superficial, aplica presión con un pedazo de papel higiénico húmedo por unos 10 a 15 minutos para que deje de sangrar.

Si no para de sangrar tras 15 minutos o si la sangre parece estar saliendo a pulsadas, llama al doctor, puede que necesites puntos.

Termina el trabajo con un humectante

Es común sentir algo de irritación cuando termines de rasurarte. Esto es causado por la piel sensible de esta área. Puedes evitar esto con una buena dosis de un humectante sobre la piel.

Pero si la irritación y comezón dura varios días, es posible que te haya dado foliculitis o una infección.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.