Tu pareja que próximamente será tu ex no hace más que insultarte, se rehusa a aceptar alguna responsabilidad por el fin de la relación. Quizá no lo hayas notado antes, pero es posible que estés terminando con un narcisista.

Un narcisista es una persona que le importa principalmente si mismo, tiene creencias y comportamientos de grandeza y una falta de empatía. O sea que el narcisismo es un desorden mental, no es algo tan simple como que estás tratando con un patán.

Estas son algunas señales que te dejarán claro si estás terminando una relación con un narcisista:

Todo se lo toman personal

Los narcisistas son muy sensibles y todo se lo toman personal. Por ejemplo, si no tienes ganas de tener sexo porque mueres de cansancio tras un largo día de trabajo, un narcisista dirá que no lo amas o que ya no sientes atracción hacia él. No son capaces de entender que el problema es causado por un factor externo.

Insisten que estás loco

Los narcisistas nunca toman la responsabilidad por su comportamiento y le echan la culpa a todos quienes los rodean. Con frecuencia te harán sentir como si tu fueras la persona con el problema dirigiendo la responsabilidad hacia ti a la vez que te inventa críticas sobre tu persona.

Al terminar la relación rápidamente asumirán el papel de víctima en lugar de aceptar alguna culpa por que terminaran las cosas.

No creen tener que trabajar en si mismos

Para muchos, una experiencia como un divorcio es un momento para reflexionar sobre uno mismo. Sin importar cuánto sientas que te hicieron daño, una persona sana examinará el papel que tuvieron para que las cosas llegaran al punto al que llegaron.

Pero un narcisista no puede tolerar ningún tipo de crítica aunque sea constructiva. Les importa más tener la razón o demostrar que son la pareja ideal. No están dispuestos a escuchar cómo los demás los ven ni están abiertos a cambiar. Nunca tratarán de cambiar sus defectos porque en sus cabezas no los tienen.

Era dominante durante la relación

Un narcisista en una relación suele sentir la necesidad de tener el control de las decisiones importantes ya que se siente superior a su pareja.

Suele creer que su manera de vivir no sólo es la mejor, sino que la única. Esta mentalidad puede extenderse hasta el sexo en donde todo se trata de su placer y le da igual lo que tú sientas.

Se desquita con todo

Claro, durante un divorcio puedes decir algunas cosas de las cuales te puedes arrepentir, pero el narcisista lo lleva al extremo. Un narcisista puede explotar cuando siente que su grandeza es amenazado.

Esto puede ser preocupante si el abuso ha sido un problema en la relación. Sus métodos de manipulación les fallan, así que esto crea un terreno desconocido en donde exageran sus comportamientos buscando atención.

Es frío

Por otro lado, un narcisista puede parecer anormalmente frío o seco durante el divorcio. Si la relación está terminando y por decisión del narcisista, puede que se sientan tranquilos. Si la relación ya no le está funcionando para alimentar su enorme ego, puede que no te demuestre el más mínimo interés por ello y esto es porque genuinamente no le importa.

No está dispuesto a cooperar

Aunque el divorcio signifique el final de la relación, tienen que trabajar juntos para que suceda. Si tu pareja realmente no quiere cooperar durante el divorcio, puede ser indicación de narcisismo. No esperes que ceda ante nada, un narcisista intentará controlar el proceso, ya sea de manera agresiva o agresiva pasiva al retrasar las cosas o simplemente no respondiendo.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.