Las mujeres gastan mucho dinero en productos de belleza cada año. Si es tu caso, debes saber que puedes renunciar a los costosos productos y aún así verte y sentirte fabulosa con un solo ingrediente que además es muy económico.

Conoce cómo utilizar el bicarbonato de sodio puro para tener una mejor piel, cabello, uñas y más:

Ayuda a tu cabello

Las grandes marcas vendes champús, fórmulas y sueros para el cabello a un precio excesivamente caro. Si lo que quieres es eliminar la acumulación de producto (aerosoles para el cabello, acondicionadores), los daños de cloro, y el cabello graso; todo lo que necesitas es una caja barata de bicarbonato de sodio.

Para remover la acumulación de otros productos, sólo añade 1 cucharadita de bicarbonato a tu habitual puñado de champú; Para combatir los daños del cloro, enjuaga el cabello con aproximadamente la mitad de una cucharadita disuelta en agua; o espolvorea una pequeña cantidad en el cuero cabelludo y distribúyelo para hacer con él un champú rápido y fácil en seco.

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Blanquea tus dientes

Varios estudios publicados en el Journal of Clinical Dentistry encontraron que las pastas de dientes con bicarbonato de sodio no sólo eran las más eficaces para la eliminación de la placa, sino que el bicarbonato es más eficaz para blanquear los dientes que los demás productos. ¿Quieres un blanqueador casero? Para desterrar al café y a las manchas de vino de tu sonrisa, muchos dentistas recomiendan cepillarse con una combinación poderosa de bicarbonato de sodio y fresas, ya que éstas últimas contienen ácido málico, otro decolorante natural. Tritura una fresa madura y bicarbonato de sodio hasta formar una pasta. Aplícalo en los dientes durante unos minutos, enjuaga y luego cepíllate con pasta dental regular para eliminar los residuos. Y precaución: No uses este tratamiento más de dos o tres veces al mes, ya que demasiado ácido málico podría dañar el esmalte de los dientes.

Calma una quemadura de sol

Cuando el áloe no sea lo suficiente para enfriar una quemadura de la piel por el sol, intenta calmar el terreno con bicarbonato de sodio. Combina bicarbonato y agua y usa una toalla o bolitas de algodón empapadas con la mezcla para aplicar sobre la piel. La misma pasta también ayuda a calmar las picaduras de insectos, de abeja, erupciones cutáneas y la hiedra venenosa, según la Academia Americana de Dermatología. La naturaleza alcalina de bicarbonato de sodio neutraliza los elementos irritantes y restaura el pH de la piel, calma la picazón y el ardor.

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Pule la joyería

Si tus joyas de plata se ven viejas y opacas, prueba limpiarlas con este truco fácil. Sólo necesitas un poco de bicarbonato, agua muy caliente (casi hirviendo) y papel aluminio. Sumerge la joyería en un tazón pequeño, agrega una cucharada de bicarbonato y una hoja de papel aluminio. La combinación de bicarbonato con agua ayuda a quitar la suciedad de las joyas y hace que se pegue al aluminio. Remueve las piezas asegurándote que todas tus joyas tocan el papel. Después enjuaga y pule con un paño suave. Evita usar este método con joyas con piedras preciosas o material orgánico como perlas. 

Retira astillas

Para quitar esas diminutas y molestas astillas deja de excavar con una pinza. Basta con hacer una pasta de bicarbonato de sodio y agua, aplicar en la zona y cubrir con una venda. Después de aproximadamente 24 horas, la astilla saldrá lo suficiente para que puedas sacarla con unas pinzas. Si no es así, repite el proceso.

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Ayuda a oler mejor

Tú puedes utilizar bicarbonato de sodio incluso en lugar de tu desodorante. Una pizca de bicarbonato de sodio mezclado con agua funciona como un desodorante natural. Si tienes problemas para que la mezcla se adhiera a tu piel, aplica antes un poco de maicena. Y si no estás lista para despedirte de tu antitranspirante, sólo espolvorea un poco de bicarbonato en tus zapatos para hacer un sencillo y económico desodorante.

Obtén unas uñas más limpias

Amarillentas, las uñas manchadas pueden hacer que tus manos se vean más viejas. Los expertos recomiendan hacer una pasta a partes iguales de bicarbonato con agua oxigenada y frotar la mezcla con un pequeño cepillo por encima y por debajo de las uñas largas. Déjalo actuar por unos minutos y después retíralo. Si lo amarillento continúa, puede ser signo de una infección por hongos, ante lo cual es recomendable consultar con un médico.

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Exfolia la piel áspera

El bicarbonato también es un efectivo exfoliante. Utiliza tres partes de bicarbonato por una de agua y frótalo en los pies, las manos o los puntos ásperos para exfoliar la piel seca y escamosa. Evita utilizarlo sobre la piel con héridas o grietas.