Con todos regresando al trabajo presencial, puede ser fácil caer en viejos hábitos, pero no tiene que hacer así.

Ya demostraste que puedes trabajar de manera más inteligente y permanecer productiva. Para evitar caer en la modalidad de siempre al full las 24 horas, aquí te damos unos consejos para mantener balance entre tu trabajo y tu vida personal.

  1. Mantén tu calendario de trabajo actualizado, incluyendo bloques de tiempo para trabajo concentrado.
  2. Pon tu alarma para terminar cualquier junta que podría pasarse de tiempo. Cuando suene el alarma indicas que el tiempo se acabó, avisando a quien haya organizado la junta de manera que no te perjudicará.
  3. Si tienes una hora para comer, deja de trabajar por esa hora para recargar energía. El día de trabajo es un maratón, no una corrida a toda velocidad.
  4. Establece una hora estricta para salir del trabajo al agendar una clase de ejercicio o algo por el estilo. Hay que respetar esos compromisos.
  5. Nada de trabajo después de las 6 pm al menos de que sea urgente (urgente de verdad). Por lo contrario, manda un correo sabiendo que es posible que no conseguirás respuesta hasta las 9 am.
  6. No pidas el día libre con poco aviso. Mejor dile a tu jefe que necesitas un día para tu salud mental (lo cual suele ser cierto.)
  7. Utiliza la función de “enviar después” con el correo. De esta manera, terminaste, pero no creas la expectativa de que otros te tengan que responder fuera del horario laboral.
  8. No pases todo el día en el escritorio, muévete en la oficina o sal a pasear por una hora para trabajar en un café si necesitas algo de espacio.
  9. Sé táctica después de las 4:30 pm, y guarda una victoria fácil (digamos que tienes buenas noticias sobre algún proyecto) para mañana en la mañana. Es una buena forma de parecer 110% más productiva.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.