Su nombre es José Zamora y tenía una rutina.
Durante su búsqueda por meses por empleo, dice que ingresó a su computadora todos los días por la mañana y buscó trabajos por internet, enviando su currículum a cualquier trabajo que sentía que podía emprender. En el video, él calcula que enviaba entre 50 a 100 solicitudes de empleo diarios, lo cual es algo impresionante.
Pero Zamora dice que no estaba recibiendo respuestas. Así que siguiendo una corazonada, decidió eliminar la ‘S’ de su nombre.
José Zamora se volvió Joe Zamora y una semana después dice que su bandeja de entrada estaba lleno.
También explica que no cambió nada en su currículum más que una sola letra en su nombre.
Aunque las solicitudes de trabajo en línea parezcan la forma más efectiva de evitar la discriminación, varios estudios y solicitantes han notado lo contrario. Los empleadores conscientemente o inconscientemente en EUA discriminan a los nombres que suenan afroamericanos o latinos.
Un estudio descubrió que solicitantes con nombres “blancos” recibieron 50% más respuestas que solicitantes con nombres que sonaban de otra raza, una desigualdad significativa.
“Tuve que dejar una letra de mi nombre para conseguir un título,” dice Zamora. “A veces creo que la gente ni esta consciente de que están juzgando a otros, aunque sea por el puro nombre, pero creo que todos lo hacemos de vez en cuando.”
Publicado por Othón Vélez O’Brien.