Aunque es una de las actividades básicas para la supervivencia de la especie, la alimentación es, hoy en día, uno de los hábitos menos respetados a causa del ritmo de vida cotidiano tan acelerado.
Ese mismo ritmo de vida, en donde el tiempo y la rapidez son cada vez menos gratificantes, también ha provocado que muchas personas padezcan problemas de salud y vislumbren alteraciones en su organismo, producto de una mala alimentación.
El problema con estas rutinas, según la nutricionista y dietista Cynthia Sass, es que se come más cantidad y menos calidad. Así que en Caracteres.mx te compartimos algunos de los errores más frecuentes a la hora de comer para que procures evitarlos:
Come menos alimentos preparados
Por falta de tiempo, muchas personas optan por ahorrarlo dejando de cocinar, aunque es cierto que se puede recuperar más tiempo, desde el punto de vista alimenticio, no es la mejor opción para la salud.
Los alimentos preparados poseen un mayor contenido calórico y de otras sustancias perjudiciales, como colorantes o conservantes, lo cual termina siendo perjudicial para la salud, para evitarlo puede optarse por productos más saludables y sencillos de preparar, tales como: las verduras a la plancha, huevos revueltos y purés.
No te distraigas al comer
Cuando se come distraído, se ingiere un 10% más en esa comida y un 25% más en la siguiente porque se tiene la sensación de no haber ingerido lo suficiente en la anterior.
En el caso de estar solo, la incomodidad que genera puede hacer que se acabe por tener como compañera a la televisión y no se preste atención a la comida. Apagarla y disfrutar de la comida al masticar es el mejor consejo.
Cuida las cantidades
Prepara justo la cantidad de comida que necesitas, se debe tener claro qué comer y establecer medidas para evitar caer en este error. En la gran mayoría de productos alimenticios aparecen las cantidades recomendadas. Al principio puede ser complejo, pero si se realiza con frecuencia terminará convirtiéndose en hábito.
No tragues, mastica
Cuando se come solo es más probable que se haga con mayor rapidez, a veces sin notarlo puede tragar, en lugar de masticar. Los aspectos negativos que pueden atraer esta acción son numerosos.
Un artículo del blog de nutrición Get you in shape explica cómo afecta masticar poco. Entre los aspectos negativos más significativos destaca que “la absorción de nutrientes será mucho más costosa, que existe más riesgo de acidez estomacal, así como una peor digestión.”
Además Sass señala en un estudió que aquellas personas que mastican poco tienen un 84% más de posibilidades de sufrir sobrepeso, tras controlar la alimentación de 3.000 personas.
Con información de El Confidencial