A primera vista, podrían pasarse como obras maestras de Monet o Renoir, pero estas pinturas impresionistas, que se están vendiendo por miles de dólares, fueron pintadas por una niña de cinco años que no puede hablar.
Se llama Iris Halmshaw, una niña autista de Leicestershire, en el Reino Unido. Ha producido estas obras increíbles desde los 3 años.
Es increíble que algo tan brillante y planeado haya sido producto de una niña tan pequeña.