No todos se pueden dar el lujo de contratar servicios de asesoramiento financiero, pero en muchos casos, contratar un poco de ayuda puede ser una muy buena inversión.
Caracteres.mxte presenta una guía sobre cuándo deberías de buscar ayuda financiera profesional y cuándo deberías hacer las cosas tú solo.
Reparar tu crédito: hazlo tú
Estafas para reparar tu crédito son un dolor de cabeza para la Comisión Federal de Comercio (FTC), el cual advierte a la gente de no pagar a ninguna empresa por adelantado o hacer tratos con una empresa que ofrece darte una nueva identidad (eso es fraude). Existen compañías legítimas para reparar crédito, pero no hay nada que puedan hacer por ti que no puedas hacer tú mismo.
Si estás teniendo problemas manejando tu dinero o lidiando con tus deudas, considera contratar a un asesor con buena reputación.
Impuestos: contrata a un profesional
Si tu único ingreso te lo da un patrón y no detallas tus deducciones, entonces probablemente estés bien usando software de impuestos para preparar tus devoluciones. Una vez se compliquen más tus finanzas, sería bueno contratar a un profesional.
Las leyes de impuestos son complicadas y cambian constantemente. Es trabajo de los profesionales estar siempre pendiente. Una persona buena con los impuestos incluso puede enseñarte las mejores maneras de minimizar tus cuentas.
Inversiones: hazlo tú
La mayoría de los asesores financieros no se les requiere poner los intereses de sus clientes adelante de los suyos. Legalmente pueden dirigirte a inversiones mediocres o con intereses con alta tasa porque ganarían mayores comisiones.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.