En este encantador dorama por Melissa Jay Craig, un pequeño bosque con 96 hongos hechos con libros florecer alrededor de dos paredes.
Los hongos – o libros, depende cómo quieras ver esta instalación artística – tienen los patrones del hongo venenoso, Amanita Muscaria. La artista dice tener una fascinación extraña con los hongos desde que era pequeña cuando se encontró por primera vez unos hongos naranjas y blancos en un pequeño terreno entre enormes pinos. Fue la primera vez que tuvo la sensación de que el planeta tiene mensajes para aquellos suficientemente curiosos para verlos.
Craig no siente nada de asco por los hongos, sino que los considera inspiradores. Porque son tan prolíficos, suficiente como para dominar ciertos hábitats, ella considera que son “agentes del cambio.” Así que con hongos que parece libros, combina el poder de la palabra escrita con la naturaleza dominante de los hongos.
“Los hongos son clandestinos e inconrtolables, viven ocultos debajo de la tierra en lugares familiares, listos para brotar vida inesperadamente.”
– Melissa Jay Craig
Publicado por Othón Vélez O’Brien.