La semana pasada, un vuelo de British Airlines desde Londres a Dubai tuvo de darse la vuelta tras sólo 30 minutos en la aire. No fue por causa de terroristas ni problemas climáticos ni mecánicos, sino porque alguien en el avión dejó un verdaderamente horrible olor en el baño del avión.
Aunque esto será muy desagradable, en realidad no es un gran peligro para transmitir enfermedades. Existen muchas razones por la cual las heces huelen particularmente mal y no siempre significa que estas enfermo.
El medicamento o demasiado de alguna vitamina en particular puede en ocasiones alterar las funciones de tu tracto gastrointestinal. Ciertas enfermedades, como alergias a alimentos, enfermedad de intestino inflamado, pancreáitis o fibrosis quistica pueden alterar el olor de la heces, pero estas enfermedades no son transmisibles.
Un pasajero dijo que las heces tenían una consistencia líquida, pero esto podría ser por una variedad de razones, no necesariamente por una enfermedad.
Un mal olor llenando el aire significa que las moléculas de olor están saliendo del baño a tu fosa nasal, pero estas partículas no son lo mismo que patógenos flotando en el aire. Es por esto que enfermedades como la ébola no existen en el aire, el virus es demasiado grande como para ser levantado por el viento.
Simulaciones muestran cómo viajen las partículas en un avión y pueden llegar bien lejos, pero en cuanto a las bacterias en las heces, el riesgo es el mismo. Normalmente con este tipo de bacteria, el riesgo se encuentra en la ingestión y no la inhalación de estas bacterias.
En realidad, si esto te sucede a ti en un avión, la verdad es que tendrás que aguantar el mal olor. Puede ser incómodo, pero no existe casi ningún riesgo de que te enfermarás por el olor.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.