Después de oír a alguien decirle al refresco «los cigarros de nuestra generación», el fotógrafo, Henry Hangreaves, decidió buscar una forma de visualizar la enorme cantidad de azúcar que contienen estas bebidas.
Al hervir todo el agua del refresco, entre otras bebidas, lo que quedó era una especie de pasta pegajosa como el caramelo. Hangreaves tomó esta sustancia y la vertió en unos moldes para hacer paletas y esto es lo que resultó:
Publicado por Othón Vélez O’Brien.