El artista alemán Wolfgang Stiller creó esta asombrosa colección de arte basada en esculturas que asemejan humanos en forma de cerillos a medio consumir.
Las esculturas son bastante reales e impactantes ya que cuentan con dimensiones fuera de este mundo. El artista se inspiró en las personas que sufren de cansancio y agotamiento físico. Los cerillos son una metáfora para demostrar el desgaste de una vida estresada.