Montar una bicicleta te beneficiará no sólo físicamente, también fomenta la mejora de los procesos involucrados con la memoria y el aprendizaje. Pero, ¿qué le ocurre a tu cerebro cuando andas en bici?
El ejercicio en su totalidad mejora las conexiones neuronales, al mismo tiempo que tu capacidad de atención crece hasta en un 30%. Esto quiere decir que el metabolismo cerebral se ve beneficiado cuando decides tomar la bici.
Se ha comprobado que el ciclismo incrementa el tamaño del hipocampo en el cerebro; estructura relacionada con la memoria y el aprendizaje. Después de montar la bicicleta diariamente por 6 meses, los cerebros de varios participantes en un estudio de la Universidad de Illinois fueron puestos a prueba obteniendo los siguientes resultados: el hipocampo de los participantes creció un 2%, la capacidad de resolución de problemas mejoró en un 15-20% y al mismo tiempo, mejoraron su memoria.
Los mismos participantes aseguraron que se sentían más centrados y con una capacidad mayor de memorizar ciertos aspectos de su vida diaria.
Existe una mejor oxigenación en toda la corteza cerebral ya que la conexión entre el hipocampo y el giro del cíngulo; región encargada de interpretar emociones y mejorar el proceso de atención.
Se elevan los niveles de dopamina y endorfinas, ayudando a combatir la ansiedad y la depresión ya que son neurotransmisores relacionados con la felicidad.