Es típico de nuestras madres que nos piden que no les demos nada para navidad o cualquier otra fiesta.
La mayoría termina comprándole algo especial a sus padres esperando que les encante. Pero sea lo que sea que les regales, siempre les va a encantar sin importar el costo.
Pero por lo visto, los mejores regalos son aquellos que el dinero no puedo comprar. Estos son los que toman tiempo, consideración y aveces sacrificio.
Este hombre decidió darle algo a su mamá que ella quería por años. Ella odiaba apasionadamente la barba de su hijo. Ya siendo un adulto, pues su mamá no tiene lugar para hacer que se la quite, pero es justo ese detalle que hace que valga mucho más el sacrificio de este hombre. La reacción de su mamá es lo mejor.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.