La comida une a la gente, compartir una mesa causa que empiece una conversación, que se creen recuerdos y mucho más. Pero también es un momento especial para compartir con tus hijos. Es una oportunidad para enseñarles algo sobre la comida, como estas lecciones:
La comida es más que nutrición
Darle combustible a tu cuerpo empieza en la cocina. Pero el «combustible» es más que calorías, carbohidratos, proteína, grasa, vitaminas y minerales. Claro, la comida incluye todo eso, pero algunos más que otros.
Pero la comida hace más que simplemente llenar nuestros cuerpos de nutrientes, crea comunidad, conversación y ayuda a la gente a reír. Algunos de los beneficios emocionales y sociales de pasar rato con tus hijos al comer son:
- 82% de los padres se sienten más cercanos a sus hijos cuando cenan juntos.
- 70% de los niños aprecian a sus padres más cuando comparten su almuerzo juntos.
- 61% de los niños creen que sus padres son más divertidos y están más relajados cuando cenan juntos.
Otras investigaciones muestran que aquellos que cocinan y comen juntos tienen una relación más abierta con sus hijos.
Todo empieza en la cocina
La cocina es un arte que se ha perdido. Cada vez los adultos cocinan menos, por lo tanto, los niños están aprendiendo menos de la cocina. Cocinar con tus hijos es una perfecta oportunidad para enseñarles lo básico de la cocina, deberías intentar volverlo una actividad familiar en la que todos se diviertan.
Si les das el poder a tus hijos de decidir cosas en la cocina, que decidan que se va a cenar y que ayuden con la preparación de los ingredientes. Así también evitas que vayan a querer otra cosa para cenar.
Cómo empezar a cocinar con tus hijos
- Organiza un horario que funcione para todos. Basta con que empieces haciéndolo unas dos o tres veces a la semana.
- Que tus hijos te ayuden a elegir un platillo, haz una lista con una receta y compren lo necesario juntos.
- Involucra a tus hijos en la preparación (tomando en cuenta su edad, claro)
Quizá los más pequeños deberían ayudar mezclando ingredientes y aquellos un poco mayores podrían usar el cuchillo para cortar y picar y a cierta edad los introduces al fuego.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.