Y si puede detectar las acciones de un patán en los demás, es muy seguro que también se da cuenta cuando tú lo estás siendo también.
Los investigadores notaron que los bebés pueden detectar las intenciones dañinas de una persona hacia otra, así que se preguntaron si animales como los perros o changos tendrán la misma habilidad intuitiva.
Investigaciones previas han demostrado que los monos le ponen atención muy cuidadosa a las interacciones para ver si otros serán de ayuda o no, los perros hacen lo mismo. Por ejemplo, en otro estudio, los perros mostraron una preferencia hacia aquellos que parecen generosos sobre aquellos que no lo son.
Así que en este nuevo experimento, los perros vieron a sus dueños intentando abrir un contenedor. Después de varios intentos sin éxito, otra persona entró a ayudar, permitiendo que el dueño del perro lograra abrir el contenedor. Un tercer participante entró al cuarto y no ayudó intencionalmente para ayudar a abrir el contenedor.
Después, ambas personas que no eran el dueño extendieron las manos con un premio para perro. Los perros por lo general siempre se acercaron al que ayudó a su dueño, sin embargo, tomaban el premio de la persona que no ayudó a regañadientes si era la única opción presentada.
Es posible que el tiempo que llevamos teniendo una relación con los perros los ha vuelto sensibles, no sólo al comportamiento de sus dueños, sino que de las interacciones de otras personas también. El estudio demuestra que este juicio afecta la manera que los perros se comportan ante los humanos.
Así que la próxima vez que sientes que te estás portando un poco como un patán, que no te sorprenda si te sientes juzgado por el perro. Si, dejarás de recibir el mismo afecto que antes.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.