Nadie está diciendo que fumar no es causa de cáncer pulmonar. ¿Pero será cierto que los cigarros “light”, aquellos con filtros que diluyen el humo con aire, brindan alguna protección comparado con los normales?
Pues resulta que no y en realidad podrían ser la causa detrás de un incremento en casos de cáncer pulmonar.
Entre los años 50 y 70, el cáncer pulmonar de células escamosas era el tipo más común en hombres, pero a lo largo de los siguientes 40 años, mientras fumar iba en declinación, la incidencia del tipo de cáncer conocido como adenocarcinoma, no disminuyó junto con los otros, de hecho, lo superaron en el 1990 como el cáncer más común.
Investigadores creen que esto es resultado de un incremento en fumadores de estos cigarros “light”.
La evidencia es suficiente para concluir que el aumento del riesgo de adenocarcinoma de los pulmones en fumadores resultó por los cambios del diseño y la composición de los cigarros en los años 50.
La idea de que el menor consumo de alquitrán equivale a menor riesgo para los fumadores surgió en los 50, así que las compañías tabaqueras buscaron maneras de disminuir el índice de alquitrán en sus productos. Lograron esto al agregar filtros, aumentando la porosidad del papel y luego metiendole hoyos en los filtros para diluir el humo.
Pero aunque los filtros de ventilación parecían disminuir el consumo del alquitrán, los cambios al cigarro en realidad lo volvieron más tóxicos. Esto es porque los cigarros de filtro se queman más lento, permitiendo más tiempo para que el carbón arda, lo cual causa la formación de componentes más tóxicos.
También cambian la manera en que la gente los fuma. La gente da fumadas más largas, inhalan más profundo y mantienen el humo en sus bocas por más tiempo, aumentando las toxinas que entran a tu organismo.
Esta es una de las razones por las cuales se empezó a requerir de las compañías tabaqueras quitaran las etiquetas de “light” en sus productos en el 2009. La etiqueta hacía que los consumidores creyeran que estaban consumiendo un producto menos dañino cuando eso no era el caso.
En muchos casos, las empresas simplemente cambiaron la etiqueta por otra cosa, como “light” a “blancos” o “plateados,” pero el diseño permanece igual.
Por esta razón los autores del estudio han intentado conseguir que la FDA considere prohibir los cigarros con filtro de ventilación, ya que no los hacen más seguros para consumir y porque no se ha demostrado ningún beneficio de utilizar estos filtros en sus productos.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.