Cuando tienes que aguantar un largo vuelo en asientos pequeños e incómodos, lo último que querrás es estar todo arreglado, pero no optar por la opción cómoda con playera y/o pants tiene sus ventajas. Es probable que te den un mejor asiento.
Alguna vez las aerolíneas le daban mejores asientos a los pasajeros a base de cómo iban vestidos. Si pareces un hombre de negocios pero sólo pudiste conseguir el boleto económico, es posible que te muevan a primera clase.
Pero ahora las cosas son diferentes y las aerolíneas hacen esto únicamente con sus pasajeros en programas de lealtad. Pero que te cambien el asiento a uno mejor aún es posible.
Según George Hobica, fundador de Airfare Watchdog, recientemente le dieron un mejor asiento mientras iba vestido con un buen traje y los demás estaban con playera y sandalias. También dice que amigos suyos tienen historias similares. Un agente de Lufthansa, amigo de Hobica, ocasionalmente le da mejor asientos a personas a base de su ropa incluso después de revisar la lista de millas frecuentes de gente que las tenía.
Aparte de eso, existen otras razones para vestirte bien para un vuelo aparte de conseguir mejores asientos. Puede que ganes un poco de tratamiento especial de las aeromozas (ser amable también ayuda con esto) y nunca queda de más verse profesional.
Fin y al cabo, nunca sabes con quién te sentarás. Además, si pierden tu maleta, no te tienes que preocupar por llegar en pants a tu junta.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.