Esto puede ser alarmante la primera vez que lo notes, pero es bastante común y realmente no es nada de qué preocuparse.
Lo más probable es que estés viendo las papilas que se hacen resaltar como fibras de tapete. Acumulación de bacterias, partículas de comida, piel muerta y placa pueden causar que se vean blancos. Esto ocurre cuando no cepillas tu lengua regularmente.
Además de hacer que tu lengua se vea blanca, esta acumulación puede liberar azufre, haciendo que te huela mal la boca. Mientras más tiempo pasas sin cepillarte los dientes, más grueso y difícil de quitar se vuelve esta acumulación blanca.
Para prevenir que se acumule esto y hacer que tu lengua se vea rosa y saludable, simplemente cepillas tu lengua cada que te cepilles los dientes. Procura tomar suficiente agua también, porque si estás deshidratado, puede que no produzcas suficiente saliva que tiene un papel importante en eliminar la placa antes de que se pueda acumular.
Quizá quieras evitar enjuagues con alcohol ya que te secan la boca, haciendo que sea más difícil quitarte esta capa blanca de la lengua.
Sin embargo, aveces la lengua blanca puede indicar algo más. Puede tratarse de arestín, que proviene de bacterias u hongos. Esto puede ser causado a alguna enfermedad que este perjudicando tu sistema inmunológico, como diabetes, cáncer o VIH.
Si este es el caso contigo, seguramente presentarás más síntomas que una simple lengua blanca. Seguramente verás esta capa blanca en otras partes de tu boca. Para esto si es recomendado que vayas con el doctor y no trates de remover lo blanco de tu boca.
Pero si la blancura no está uniformemente distribuido alrededor de tu lengua, sino en una serie de círculos o aros, esto podría ser debido a una condición conocida como lengua geográfica, que afecta a 5% de la gente. Esto puede verse raro, pero no es dañino y no tienes que hacer nada para remediarlo.
Si tienes una línea blanca que recorre tu lengua, podría tratarse de “línea alba,” tejidos de cicatriz de alguna vez que te habrás mordido la lengua. Tampoco requiere tratamiento.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.