Hoy te presentamos un video que documenta todas las veces que Samuel L. Jackson usa su grosería y frase celebre favorita. La usa tanto que cuando la escuchas ahora, es difícil pensar en otra persona, incluyendo la que acabas de escuchar diciéndolo.
Si sientes que esto no aplica a la realidad, pensarás lo contrario después de ver este video.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.