Vivir la vida de “pura buena vibra” está destruyendo tu relación sin que te des cuenta. La positividad tóxica es la creencia de sólo enfocarte en lo positivo e ignorar y rechazar todo lo que pueda causar emociones negativas.
Tener una mentalidad positiva es importante para la fortaleza mental y para superar tiempos difíciles, ¿pero cuándo se vuelve demasiado de algo bueno?
Negar las emociones crea un problema mayor
Hacer como si no existieran las emociones negativas es una señal de positividad tóxica. Fingir que todo está bien en tu relación cuando evidentemente se está desmoronando todo sólo creará un problema que no podrás resolver.
Sin importar si tus emociones son buenas o malas, son válidas y necesitan ser escuchadas. Si no dejas que tu pareja de desahogue de vez en cuando, puede amargar la relación.
Permitir que ocurran las emociones negativas y las conversaciones difíciles en tu relación es algo bueno. Es una oportunidad de resolver los problemas en lugar de imaginar que no existieran.
Previene la conexión humana auténtica
Sólo tener una perspectiva positiva de las cosas puede dañar tu relación porque sin compasión en tus acciones, habrá una desconexión entre ustedes.
Subirle el ánimo a tu pareja está bien, pero en el momento correcto. Para evitar que estos actos parezcan poco genuinos, tu pareja tiene que ver que estás dispuesta para ser un apoyo emocional y no sólo decir cosas bonitas.
Demasiada positividad puede alienar a la gente
Cuando alguien se encuentra en tiempos difíciles, el que todo mundo le esté diciendo que todo está bien y anden citando frases motivadoras puede ayudar menos de lo que crees.
La positividad no arregla todos los problemas, especialmente cuando estás tratando de sanar heridas emocionales. Pierdes la empatía cuando ignoras los problemas de los demás y les pides que lo ignoren.
Tu pareja no querrá compartir sus sentimientos contigo
Siempre ver el lado positivo de las cosas puede ser algo reconfortante en tiempos difíciles, pero no necesariamente es algo que quieres que te digan en ese momento.
¿Tienes alguna amiga con la que nunca tienes ganas de compartirle tus buenas noticias porque siempre es bien negativa y no te ayuda? Pues, pasa al revés también, hay gente que no va a querer compartir sus malas noticias contigo si siempre estás siendo positiva todo el tiempo.
La positividad tóxica puede causarte desilusión
Cuando las cosas no te salgan bien, quizá te culpes a ti misma o a tu pareja. Puede haber tensión en la relación si siempre tienes altas expectativas de todo, y cuando no se cumplen, puedes terminar cuestionando el futuro de tu relación.
Sólo tener una mentalidad positiva no resuelve problemas
Para resolver problemas en una relación, vas a tener que ensuciarte las manos. Con la positividad tóxica es muy fácil ignorar la causa de los problemas.
Quizá una mentalidad positiva resuelva tus problemas, pero no resolverá los de alguien más. Acepta que hay fallas en cada relación y aprende cómo se pueden resolver, así es como crece una relación.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.