[sws_blockquote_endquote align=”left” cite=”” quotestyle=”style01″]Como parte de las actividades del 28 Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG), hoy se presentó aquí el Anuario estadístico del cine mexicano 2012, una publicación gratuita del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) que ofrece un amplio panorama de los diversos rubros que involucran a la industria fílmica. [/sws_blockquote_endquote]
A la ceremonia fueron invitados el académico y ex consejero electoral José Woldenberg; el productor de cine Rodrigo Hernández, el cineasta Víctor Ugalde y Rodrigo Soto, quienes compartieron sus comentarios sobre la publicación.
Al tomar la palabra, Woldenberg destacó la función del cine como expresión de arte, pero también como industria, rubro que es necesario reforzar en un mundo donde la competencia es expansiva y para lograrlo “se requieren políticas específicas, así como diagnósticos que ilustren el estado que guarda la industria”.
Detalló que algunos de los datos incluidos en el anuario señalan que en 2012 se produjeron 112 largometrajes, de los cuales 66 por ciento fueron apoyados por el Estado, lo que representa un crecimiento importante en el sector de producción, pues en 2007 la cifra fue de 70.
En 2012, abundó, se estrenaron 319 películas, de las cuales 67 fueron mexicanas, pero 25 de ellas fueron vistas por menos de mil personas, “no se necesita ser (Albert) Einstein para documentar el privilegio que las exhibidoras otorgan al cine extranjero y como consecuencia el cine mexicano no encuentra un lugar para ser proyectado”.
José Woldenberg sugirió que en los próximos anuarios se informe el número de películas que nunca se estrenaron, “se trata del cuello de botella más relevante del cine mexicano y eso lo percibe la mayoría de los espectadores”.
En su oportunidad, Víctor Ugalde, presidente de la Sociedad Mexicana de Directores-Realizadores de Obras Audiovisuales, destacó que en este momento de transición tecnológica, son necesarios documentos como el anuario, que ha seguido paso a paso la transformación tecnológica y sus consecuencias en la producción y el consumo.
El también cineasta destacó que uno de los datos alarmantes incluidos en el anuario es que menos del 50 por ciento de las películas mexicanas pudieron ser proyectadas en tan sólo siete estados de la República, “los exhibidores no cumplen con el artículo 19 que estipula dar al cine mexicano una semana de exhibición”.
Finalmente, Ugalde sugirió que para posteriores ediciones del anuario sería necesario incluir las estadísticas de las actividades de Fidecine y Foprocine, con información detallada sobre los hechos y resultados, así como la información fragmentada del Eficine.
Guadalajara, 5 Mar. (Notimex)