Todos sabemos que desde hace tiempo las autoridades han implementado un programa para el control de los ciudadanos que al salir ya sea a una comida, cena o de fiesta, no hayan excedido el límite permitido de la ingesta de alcohol. El alcoholímetro.
Pero, ¿en verdad este programa funciona?
¡De alguna forma no! Y no por que el programa no sea eficaz o que no este dotado de tecnología adecuada para hacer los controles, o que las autoridades a cargo no sean lo suficientemente profesionales para cumplir con el objetivo al que se les fue asignado.
En mi opinión, este programa esta condenado a ser un programa más, sin que llegue a cumplir su verdadero objetivo.
¿Por que digo esto?
Porque somos nosotros, los habitantes de esta ciudad, los que provocamos que este programa no funcione, hacemos lo imposible por violar sistemáticamente las leyes, esas que nos salvan la vida.
¿La vida? ¡Que dramático dirán muchos!
Si, ¡la vida! Díganme ustedes, ¿de qué nos sirve un programa que es saboteado constantemente por nosotros, los usuarios de la red, del Internet, que creyendo que hacemos una labor social avisando por Twitter las localizaciones de estos controles?
Creemos que ayudamos a esas personas inconscientes, que excediendo el límite permitido de alcohol y que sin ninguna responsabilidad, circulan por la ciudad poniendo en peligro la vida de los demás.
¿Qué cara pondría esa persona que notificó de un control de alcoholemia y que un borracho, excedido en el límite, se estrella y mata a las personas de otro coche y que esas personas fueran los parientes de este buen Ciudadano que se tomó la molestia de avisar?
Nos quejamos mucho de las autoridades, pero la responsabilidad empieza por uno. Alertar de estos controles, lo único que hacemos, es ser cómplices de un posible homicidio, ser cómplices de dejar a familias desechas por la pérdida de un ser querido por culpa de un borracho irresponsable.
¡Hagamos conciencia! Si no, la lucha de los alcoholimetros no sólo será en contra de los violadores de la ley, será también en contra del internet.
Bueno esta es mi opinión. Y tu que opinas?
Escrito por Víctor Cueto.