Justo cuando pensaste que los asientos de clase turista son demasiado apretados, Airbus salió con un concepto que parece más alguna especie de aparato para torturas que un asiento de pasajeros.
El manufacturero de aviones quiere patentar un nuevo diseño de asiento que sienta al pasajero en un asiento angosto y se levantan cuando no están siendo usados con el propósito de ahorrar espacio. Los cojines tienen forma de asientos de bicicleta y lo que falta es lo que se conoce como la “masa”, osea todo lo que ocupa el cojín, la mesa desplegable y un respaldo para la cabeza.
El Washington Post bautizó estos asientos como “los asientos más incómodos de avión que han existido jamás.”
La idea es que los pasajeros se aguantarán la incomodidad para vuelos cortos y el diseño del asiento permite a las aerolíneas hacer mucho más con el espacio limitado a bordo.
“La comodidad reducida sigue siendo tolerable para los pasajeros mientras el vuelo sea de una o pocas horas,” escribe Airbus.
Pero los diseñadores saben que pueden llegar hasta cierto punto, en especial cuando se trata de espacio para las piernas.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.