Con 17 años de edad, ya vestía la casaca verde amarela y debutaba con el combinado nacional rodeado de magníficos futbolistas como Garrincha o Vava, que sin duda alguna fueron parte importante del exitoso paso del mejor futbolista de la historia, Pelé.
Edson Arantes do Nascimento recibió por parte de la FIFA el balón de oro, galardón que se entrega al mejor futbolista del año, pero en esta ocasión el delantero brasileño se llevó los reflectores luego de recibir este premio tras su monumental carrera llena de logros y goles, recordado además por ser parte de la selección campeona en los mundiales de Suecia 1958, Chile 1962 y México en 1970. El manda más del futbol, la FIFA, hizo especial este evento premiando al astro brasileño momentos antes de saber quien de la terna integrada por Messi, Ribéry y Ronaldo recibiría el balón de oro en la edición 2013.
Nunca pudo recibir dicho premio cuando era jugador, ya que las políticas para determinar a los elegibles de ganarlo, no permitían que alguien no europeo lo ganara, situación que lo alejó por completo de la posibilidad de obtener tal distinción. Ahora, O Rei ya cuenta con un trofeo más en sus vitrinas, aunque algunos años después.
Conmovido hasta las lágrimas, un hombre que solo derrochó talento donde quizo, poseedor de una pegada con ambas piernas y un remate de cabeza imparable, hicieron de Pelé un futbolista que indudablemente será difícil de superar, el debate sobre los goles convertidos en partidos oficiales pasa a segundo término ya que su capacidad con el balón y su destreza dentro de la cancha, además de su intachable calidad humana han hecho que se haya mantenido a lo largo de los años como el más grande futbolista de todos los tiempos.
En el 2000 fue nombrado como jugador del siglo XX, y sus jugadas y sus goles siguen apareciendo y seguramente seguirán vigentes muchos años, a pesar de que jugadores brillantes han seguido apareciendo en el plano internacional, el legado de Pelé sigue intacto.
Para muchos es una joya que solo podemos ver en repeticiones, pero ya me imagino el deleite que fue vivir y admirar aquella época del futbol… de oro, como su balón, lo de Pelé simple y sencillamente será inolvidable.