Saluda al advantamo, el primo intensamente dulce del aspartamo que fue aprobado por la FDA para entrar al mercado de alimentos.

El advantamo se une con cinco otros endulzantes: la sacarina, aspartamo, sucralosa, neotame y acesulfamo. Todos son conocidos mejor como Sweet and Low, Equal, Splenda, Newtame y Sweet One, respectivamente. La stevia no entra en esta lista por no requerir de la aprobación de la FDA.

El advantamo es 20,000 veces más dulce que el azúcar convencional, convirtiéndolo en el endulzante más dulce hasta la fecha. Es blanco, cristalino y se disuelve fácilmente en agua.

No se descompone con el calor, por lo tanto se espera que se usará para comida horneada, confecciones de postres, mermeladas, mieles, betunes y también refrescos.

A diferencia del azúcar, miel y melaza, el advantamo y los otros endulzantes de alta intensidad no agregan una cantidad substancial de calorías a los alimentos a los que se agregan. Tampoco elevan los niveles de glucosa en la sangre.

La seguridad de estos endulzantes artificiales ha sido cuestionado mucho y algunos nutriólogos creen que la dulzura intensa que le dan a los alimentos puede perjudicar el proceso normal metabólico. Pero el FDA los declara seguros de consumir.

Como el aspartamo, el advantamo contiene feninlalaina, el cual se metabolisa con dificultad por la gente con un desorden genético muy raro llamado fenilcetonuria. Pero dado su dulzura intensa, se usaría un volumen bastante menor que el aspartamo. Como resultado, personas que padecen de fenilcetonuria pueden consumirlo sin preocupación.

La FDA fijó el consumo seguro diario del advantamo en 32.8 miligramos por kilo de masa corporal, el equivalente de 40,000 sobres de advantamo. La agencia declaró que 165 paquetes por día como la cantidad aceptables de ingestión de aspartamo y sucralosa (Equal y Splenda) y 250 paquetes por día se sacarina (Sweet’N Low)

Publicado por Othón Vélez O’Brien.