Viernes trece ya pasó, pero los malos espíritus siguen bien, al menos cuando se trata de jugar una ronda amistosa de ouija. Recientemente tres jóvenes estadounidenses que estaban de vacaciones en México mostraron señales visibles de “posesión” mientras jugaban. Durante el incidente escalofriante, los jóvenes se lanzaban por todos lados y experimentaron intervalos de ceguera y entumecimiento.

Alexandra Huerta, de 22 años, estaba jugando con su hermano, Sergio, de 23 años y su primo de 18, Fernando Cuevas en una casa en San Juan Tlacotenco. Pero después de unos minutos parecía que Alexandra empezó a gruñir y aventarse por todos lados en un estado como de trance.

Mientras tanto, Sergio y Fernando también mostraron señales de “posesión,” entre ellos ceguera, sordera y alucinaciones.

Después de que un cura local se reusó a llevar a cabo un exorcismo porque no frecuentaban ir a misa, personal médico fue llamado para hospitalizar a los tres.

Amarraron a Alexandra para evitar que se hiciera daño antes de tratar a los tres con analgésicos, medicamentos anti estrés y gotas para los ojos… lo cual pareció funcionar.

Victor Demesa, de 46 años, el director de la seguridad pública en Tepoztlan dijo “El rescate médico de estos tres jóvenes fue muy complicado.”

Presentaban movimientos involuntarios y fue difícil transferirlos a el hospital más cercano porque se estaban comportando de manera muy irregular.

“Parecía que estaban en un trance, al parecer sucedió después de que jugaron con la ouija. Mencionaron que se sentían entumecidos, veían doble, padecían momentos de ceguera, sordera y alucinaciones, espasmos musculares y dificultad para tragar.”

Agregó que aunque los tres estuvieran poseídos de verdad o simplemente fue lo que creían, lo doctores no podían estar seguros de cuál es la verdad.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.