Algunas personas no pueden platicar contigo en las mañanas hasta haberse tomado mínimo dos tazas de café primero. Las bebidas cafeinadas como el café o el té están llenos de antioxidantes que pueden disminuir tu riesgo de diabetes, pero hay razones válidas para reducir su consumo.
Si tienes problemas digestivos, eres ansioso o te cuesta trabajo dormir, podría indicar que deberías de reducir tu consumo diario de cafeína.
Pero eliminar el consumo de la cafeína completamente no es fácil ni muy realista, así que aquí te damos unos consejos de cómo reducir tu consumo de cafeína de la manera correcta:
No lo dejes un día para otro
No porque dejes de ir a tu cafetería favorita vas a dejar de querer la cafeína. Tu cuerpo dejará de tener este cambio drástico todos los días y tu cerebro va a reaccionar.
Los efectos secundarios varían para todos, pero por lo general incluyen dolor de cabeza, problemas de concentración y cansancio.
Reduce tu consumo cada semana
En lugar de ir a extremos, recomendamos que vayas dejando la cafeína poco a poco. Proponerte una meta para reducir el consumo en un 25% cada semana es de las mejores maneras de dejar la cafeína sin perder la cabeza en el proceso.
Si tomas cuatro tazas al día, trata de reducir tu consumo a tres tazas al día. Si tomas más que eso, realmente te estás haciendo un favor al moderar tu consumo.
O también puedes optar por combinar café descafeinado con tu café normal. La primera semana sería 75% tu café de siempre y 25% descafeinado, y haces esto hasta llegar a cero.
Come más proteína
Algunos estudios indican que dietas altas en carbohidratos están relacionados con mala calidad de sueño. Un estudio descubrió que los niños que consumían más carbohidratos dormían menos por las noches. Una dieta alta en proteína ayuda a aumentar la energía.
Crea un ritual por las tardes
No todos beben cafeína para despertar. Si te tomas una bebida energética o un café todos los días a la misma hora, es probable que lo hagas por hábito.
Reemplaza ese descanso para un café o lo que sea por un paseo de diez minutos para tomar el sol, hacer un poco de ejercicio y conseguir un poco de energía.
Claro, no hay necesidad de dejar la cafeína si no está afectando tu sueño ni tu bienestar digestivo. Sólo no abuses y recuerda que la tolerancia varía de persona a persona, pero la mayoría de adultos pueden consumir 400mg de cafeína cada 24 horas sin problemas.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.