Investigadores españoles crearon un bot cibernético con inteligencia artificial para hacerse pasar por una niña de 14 años de edad para detectar pedófilos en salas de chat en línea.
Negobot, así llamado por los mismos creadores,  utiliza software de inteligencia artificial (AI) para platicar con realismo e imitar el lenguaje utilizado por los adolescentes de hoy en día.
La “niña virtual” comienza con una plática neutral y puede  adoptar cualquiera de las siete personalidades de acuerdo con la intensidad de las interacciones. Los expertos dicen que puede ayudar a la policía pero se corre el riesgo de atrapar personas injustamente.

El equipo detrás del proyecto es la Universidad de Deusto de Bilbao y dicen que el software representa un avance real. Uno de sus creadores, el Dr. Carlos Laorden, dijo a la BBC que en el pasado los  “chatbots” podían ser descubiertos fácilmente. “Su comportamiento y el interés en una conversación son planas, lo cual es un problema cuando se trata de detectar sujetos poco fiables como los pedófilos”, ha apuntado.


Por el contrario, la Negobot utiliza estrategias avanzadas de toma de decisiones y tiene capacidades de la “teoría de juegos” para simular conversaciones convincentes a medida que se va dando la plática. El bot puede tomar la iniciativa en las conversaciones y recordar hechos específicos de lo que se le ha contado previamente y con quién.
Negobot sería utilizado en salas de chat donde se cree que son frecuentes los actos de pedofilia. Al iniciar una charla como un participante relativamente pasivo y a continuación, se adapta su comportamiento de acuerdo a las técnicas utilizadas por el sospechoso para tratar de ganarse a su confianza y amistad. Por ejemplo, si el sospechoso no quiere platicar con el bot, el software puede parecer ofendido o volverse más insistente.
Incluso es capaz de responder a las charlas más agresivas o peligrosas –como las solicitudes de información personal. Del mismo modo el software trata de obtener más información sobre el sospechoso; detalles tales como los perfiles de sus redes sociales o su número de teléfono, información que luego puede ser utilizado por la policía para iniciar una investigación.
Hasta la fecha, el software ha sido probado en el chat de Google y próximamente podría ser traducido a otros idiomas. Pero los investigadores admiten que apesar de tener habilidades conversacionales generales, todavía no es lo suficientemente sofisticado para detectar ciertos rasgos humanos como la ironía.