Todos tenemos cicatrices de la infancia y de diversos accidentes en la vida, pero si tienes una cicatriz que se te nota mucho y no te gusta cómo se ve, es hora de considerar tratarla.

Mucha gente espera que solitas las cicatrices desaparezcan, pero este es el método menos efectivo para removerlas. Es recomendable empezar el tratamiento rápidamente porque mientras más esperas, más difícil será eliminarla.

Antes de elegir tu tipo de tratamiento, debes entender de qué está hecha una cicatriz. Cuando una capa de la piel es dañada, nuevas fibras sanan esa parte. Aunque estas fibras nuevas–compuestas de colágeno–mejoran algo con el tiempo, aún pueden ser difíciles de eliminar por completo.

El tejido fibroso denso en las cicatrices les dan una textura elevada y más gruesa. También pueden aparecer como marcas delgadas y deprimidas, como las cicatrices de acné. Suelen ser rojas, lo cual las hace más notables.

Evita el sol

Sin importar qué tipo de cicatrización tengas, protegerlas del sol es importante. Un bloqueador solar humectante es la clave, hasta en épocas de frío.

La gente no se da cuenta que los rayos UV pueden causar que la cicatriz de oscurezca o decolore, haciendo que se note más. La combinación de inflamación, producción aumentada de colágeno en los tejidos que están sanando y la exposición al sol puede resultar en hiper pigmentación post inflamatorio, haciendo que se oscurezca la cicatriz y los tejidos que lo rodean.

Cicatrices engruecidas

Las cicatrices que se elevan, conocidas como queloides o hipertróficas ocurren cuando el cuerpo usa demasiado colágeno al sanar y crea una superficie levantada. Puedes usar pliegos de gel de silicón com tratamiento casero. Usalo en la noche en donde estés cicatrizando.

También puedes ir con tu doctor para preguntarle sobre inyecciones de cortisona que están diseñados para hacer las cicatrices más pequeñas. Aunque requiera varias inyecciones, podrás ver un mejoramiento en tan poco como una semana.

Cicatrices hundidas

Son el opuesto de las cicatrices gruesas. Estas hacen que tu piel parezca tener un hoyo o dispareja. Son causadas cuando el cuerpo no usa suficiente colágeno para curar la herida. Tratamiento láser es una buena forma de eliminar estas cicatrices. Estimula el colágeno y empareja la piel sin necesidad de tiempo de recuperación. Los resultados, que suelen ser permanentes, suelen notarse dentro de dos semanas a un mes.

Si el láser suena muy intenso, puedes usar sueros de vitamina C tópicos. Funciona más lento, pero los mejores resultados se ven al combinar estos dos tratamientos.

Cicatrices decoloradas

Además de la textura, el color de las cicatrices también hace que resalten del resto de tu piel. El color rojizo o púrpura que agarran las cicatrices probablemente son lo que los hacen más notables. El láser de V-Beam es particularmente eficaz contra este tipo de cicatrización porque la luz sólo es absorbida por la piel decolorada.

También puedes aplicar extracto de manzanilla que reduce la rojez de la piel sin tener que ir al doctor.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.