Hay una serie de vitaminas que especialmente estos días se convierten en necesarias para nuestro sistema inmunológico. La primera a tener en cuenta es la vitamina C. Y es que esta es la que te permitirá reforzar tu sistema inmunológico de posibles resfriados y gripes, un mal menor pero que, sin embargo, hace que al final siempre estemos unos días en la cama.
Para aportar a nuestro organismo la cantidad de vitamina C que necesita bastará con tomar frutas como las naranjas, mandarinas, limones o guayabas.
La vitamina D es otra de las básicas para nuestro organismo y que nos proporciona el sol de invierno. Y es que ante la exposición al sol es el propio cuerpo el que la genera. Entre las funciones de esta vitamina está mantener los huesos y dientes saludables y fuertes, además de conseguir mantener una función muscular normal y promover el desarrollo celular.
El zinc es en este caso uno de los minerales que permitirán que el sistema inmunológico se mantenga lo más sano posible. Ayuda a que el cuerpo tenga una cicatrización mucho más rápida así como a tener un sueño más reparador, lo que se traducirá en salud en todos los sentidos.
La vitamina B12 es otra de las que son especialmente necesarias en el invierno. Y es que se trata de una vitamina que te dará un extra de energía. Además, ayuda a mejorar tu estado de ánimo, tener una dosis extra de buen humor así como de energía que será el apoyo que necesitas para sobrellevar ciertos días en los que hace falta un extra de ánimo.
También la jalea real va bien para combatir la fatiga y el cansancio. Tomarla en ayunas potenciará su efecto y no lo dudes, será la mejor aliada contra los días en que nuestro organismo está más vulnerable.