Esta semana voy a hablar sobre la caza de ballenas de parte de los Inuit.

Antes de empezar, quiero aclarar que no apoyo la caza de ballenas masiva como la que se encuentra en los mares de Asia y otras partes del mundo. Este es un caso mucho más pequeño y controlado.

Los inuit son grupos indígenas, conocidos más comúnmente como esquimales (aunque cada vez se usa menos este término), que se encuentran en zonas árticas como Groenlandia, Canadá, Estados Unidos (Alaska), Rusia, etc. Viven en tundras con condiciones extremas de frío y algunos son nómadas, siguiendo las migraciones de los animales que cazan, como los caribúes, osos, focas y ballenas. De estos y otros animales aprovechan todas las partes sin desperdiciar ni un poquito para alimento, ropa, viviendas y herramientas para caza.

Los inuit de Canadá son conocidos mayormente por sus artesanías, especialmente sus esculturas. A pesar de la globalización, que sí ha estado afectando poco a poco sus vidas cotidianas, siguen practicando sus viejas costumbres y mantienen sus tradiciones que han tenido origen miles de años atrás.

Actualmente hay grupos activistas de derechos de animales que están en contra de que los inuit casen ballenas y quieren poner un fin a esto. Claro que es comprensible querer dar tu voz para ayudar a los animales que no pueden hablar por ellos mismos, pero ¿quién habla para los inuit? Mucha gente estará a favor de los activistas porque las ballenas son especies en peligro de extinción, ¿no?

El asunto no es necesariamente así. Los inuit tienen permitido cazar ciertas especies de ballenas que tienen sus poblaciones controladas y hay leyes que establecen un número fijo de cuántas de estas ballenas se pueden cazar al año. De esta forma la población de éstas no corre peligro y es tan solo una fracción pequeña la que es cazada.

Los inuit dependen mucho de su caza de ballenas, ya que por el tamaño de estos animales, es su alimento principal y con esto puede comer todo un poblado y lo comparten con cualquier otro poblado que lo necesite que tenga una carencia de alimentos.

Por el tipo de vegetación que hay en las zonas dónde viven los inuit, volverse vegetarianos no es una opción para ellos, ya que no hay suficientes plantas que den frutos para alimentar a estas comunidades indígenas, por lo mismo los mamíferos terrestres que cazan no se encuentran en tanta abundancia como uno llegaría a pensar. Por esto es importante la caza de ballenas.

Ahora para los amantes de animales que estén leyendo esto y sigan creyendo que  los inuit deberán ser deprivados de este derecho que les fue cedido, quiero plantearles estas preguntas: ustedes quieren que los inuit se conformen con el cambio y crecimiento del mundo y paren de cometer estos actos de violencia “innecesaria” contra nuestros enormes amigos del mar. ¿Les parece justo que tengan que olvidar su cultura y darla por muerta porque no se acopla con el mundo que ustedes quieren imponerles? ¿Qué harían si alguien les hiciera lo mismo porque no les parezca y no te quieran entender?

El caso es que los inuit no cazan por deporte, lo hacen por supervivencia. Mucha gente a propuesto la solución de trasladarlos o que se vayan a algún lugar donde hayan mejores condiciones de vida. Pero les vuelvo a regresar la pregunta: ¿Cómo les gustaría que te muevan a ti del lugar donde toda tu vida has vivido, dónde tus ancestros hasta donde puedas recordar han vivido y te pongan en un lugar desconocido donde tengas que buscar una nueva forma de vida, totalmente diferente a la única vida que siempre has conocido?

En conclusión, si las acciones de estas pequeñas comunidades tienen tan poco impacto en el mundo y lo hacen porque no tienen otras mejores formas de supervivencia, ¿por qué impedírselos?

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