felices

Todas deseamos ser felices en la vida, pero a menudo puede sentirse difícil de encontrar, especialmente en momentos difíciles. La verdad es que siempre habrá cosas que te derriben y te hagan sentir mal. El truco está en levantarse de nuevo y seguir la lucha. Si deseas sentirte contenta y satisfecha en la vida, la actitud y la acción son todo. De hecho, las mujeres verdaderamente felices hacen estas cosas para encontrar alegría en el día a día:

Priorizan el autocuidado

Las mujeres verdaderamente felices reconocen la importancia de cuidarse emocional, mental y espiritualmente. Dedican tiempo regularmente para hacer cosas que las hagan sentir tranquilas, relajadas y completas. Esto se manifiesta de diferentes maneras dependiendo de la persona, desde baños largos y escribir en un diario hasta salir a correr o incluso cocinar sus recetas favoritas. Se trata de nutrir el cuerpo y el alma.

Tienen una práctica sólida de gratitud

Por cursi que parezca, esto es importante. Las mujeres que están contentas en la vida también son agradecidas por todo lo que tienen. Aprecian a las personas en sus vidas, sus trabajos, el techo sobre sus cabezas e incluso el hecho de que tienen la fortuna de despertar cada mañana con la capacidad de levantarse de la cama y salir de casa. Reconocen que no todos tienen esa suerte, por lo que nunca dan nada por sentado.

Pasen tiempo nutriendo sus relaciones

Las mujeres verdaderamente felices se esfuerzan por mantener sus relaciones sólidas. Ya sea con su familia inmediata, sus amigos cercanos o incluso sus colegas, quieren asegurarse de que sus conexiones sean sólidas y saludables. A su vez, esto conduce a menos estrés y más satisfacción en sus propias vidas.

Establecen límites y están decididas a no dejar que nadie los cruce

Las mujeres verdaderamente felices conocen sus límites y no tienen miedo de establecer límites para proteger su energía. No toleran tonterías de nadie y eliminarán a las personas tóxicas de sus vidas sin dudarlo. También saben cómo decir “no”, lo que deja mucho más espacio para las cosas a las que están entusiasmadas por decir que sí.

Se muestran compasión a sí mismas

Estas mujeres saben que nadie es perfecto y que los errores pueden abrir el camino para un crecimiento increíble en sus vidas. Se ofrecen a sí mismas gracia y se perdonan cuando cometen errores, pero se comprometen a hacerlo mejor la próxima vez. Saben cómo ser amables consigo mismas porque se lo merecen.

Persiguen sus pasiones y buscan su propósito a diario

Las mujeres que están verdaderamente felices se esfuerzan por lograr las cosas en la vida que las hacen sentir bien. Son apasionadas por naturaleza y siempre encuentran tiempo para disfrutar de las cosas que llenan sus vidas de alegría. Creen que están aquí para lograr grandes cosas y siempre están tratando de descubrir cuáles son esas cosas y lograrlas.

Trabajan en estar presentes

Vivir el momento y practicar la atención plena les ayuda a saborear plenamente las experiencias de la vida. Saben que obsesionarse con lo que sucedió en el pasado o preocuparse por lo que vendrá en el futuro es un ejercicio inútil y que al hacer cualquiera de esas cosas, se perderán el aquí y ahora. Las mujeres felices no permiten que el momento presente pase de largo, y cuando se encuentran divagando, saben cómo traerse de vuelta.

Mueven sus cuerpos regularmente

Puede sonar tonto, pero tiene un gran impacto en la felicidad y el bienestar en general. Ya sean asiduas al gimnasio o simplemente amen salir a caminar todas las noches después del trabajo para estirar las piernas y tomar aire fresco, las mujeres felices saben que sus cuerpos son un regalo y quieren usarlos al máximo. No se trata de quemar calorías ni de perder peso, se trata de sentirse fuertes y vivas.

Abrazan el optimismo incluso en tiempos difíciles

No siempre es fácil ver el lado positivo de las situaciones difíciles, y eso está bien. Sin embargo, las mujeres felices saben que es importante no enredarse en la negatividad y los pensamientos oscuros, o se ahogarán. En cambio, se centran en encontrar aspectos positivos siempre que puedan, y esto hace una gran diferencia en su mentalidad.

Muestran amabilidad hacia los demás

El dicho de que la amabilidad no cuesta nada es algo que las mujeres felices llevan en el corazón. Reconocen la importancia de dar y hacer todo lo que puedan para hacer la vida de quienes les rodean mejor y más fácil. No sacrifican su propio bienestar para hacerlo ni caen en la sobreentrega, pero sí hacen de la amabilidad una prioridad en lo que pueden.

Puede que no puedas incorporar todos estos hábitos a diario, y habrá momentos en los que te equivoques y caigas en patrones negativos. ¡Está bien! Todo vuelve a esa compasión propia de la que hablamos anteriormente. El punto es que cuanto más intentes poner en práctica estos comportamientos, más naturalmente vendrán a ti y tendrán un efecto más grande. Dales una oportunidad, te sorprenderás gratamente con los resultados.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.