Un grupo de buzos en los cenotes de la Península de Yucatán en lo que se conoce como el Hoyo Negro descubrieron el esqueleto más viejo y completo que se haya encontrado en este continente.

El descubrimiento del esqueleto de una joven de 12,000 años ocurrió hace siete años, pero no fue anunciado hasta este mes, tras más investigaciones y exploraciones riesgosos.

El descubrimiento ha brindado evidencias sin medida sobre el origen de los primeros nativos de América.

Sin embargo, este descubrimiento comenzó como un pasatiempos para Alvarez y su grupo de buzos.

Alvarez, un ingeniero civil, ha buceado gran parte de su vida. Recientemente comenzó a explorar algunas de las 6,000 cuevas llenas de agua que existen en Yucatán.

El 10 de mayo del 2007, Alvarez y sus compañeros se sumergieron en La Virgen, un cenote en Quintana Roo.

“Sabíamos que este era un descubrimiento interesante, pero no sabíamos que hacer por dos años con él,” dijo Alvarez.

Desde el 2009, un equipo de investigadores de EUA y Canadá han estado trabajando con los exploradores mexicanos para documentar el sitio en el Hoyo Negro.

La edad del esqueleto fue determinado a través de pruebas de ADN de las costillas y un diente.

Los investigadores creen que la joven se cayó dentro de un hoyo profundo antes de que las cuevas se llenaran de agua. Junto con animales prehistóricos, esto ayudó a protegerlos de ladrones y lo mantuvieron preservado.

Los investigadores apodaron a la joven Naia, como las ninfas de agua de la mitología griega.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.