El experto David Salvador Medina Camarena indicó que la desintegración familiar detona embarazos en adolescencia junto con la pobreza y baja escolaridad.
El titular de la Coordinación de Prevención y Atención a la Salud del IMSS en Jalisco agregó que en los últimos 20 años se ha incrementado el número de adolescentes embarazadas, debido a los factores señalados.
“A los que se suman otros como Internet y diferentes medios electrónicos, que influyen de manera importante en una mayor libertad sexual, sin protección ni planeación, lo que conlleva a consecuencias como embarazo no deseado, aunado a un riesgo de infecciones de trasmisión sexual”, expuso.
Indicó que la edad idónea para un embarazo es entre 20 y 35 años, “cuando física y mentalmente la mujer está en plenitud, sobre todo porque el embarazo en sí conlleva riesgos importantes que se incrementan si ocurre a menor o mayor edad de este rango”.
Detalló que la responsabilidad y el conocimiento de los diferentes métodos anticonceptivos es uno de los principales factores que pueden ayudar a prevenir el embarazo en el adolescente.
“Deben de tener los adolescentes una información muy amplia de todos los métodos, cómo utilizarlos, sus derechos, pero también de sus obligaciones”, refirió.
Enfatizó que se ha encuestado a muchas adolescentes embarazadas y 80 por ciento de estas refieren conocer los métodos anticonceptivos, así como el uso de la píldora del día siguiente, lo que no hacen es programar con responsabilidad la relación sexual.
“La mayoría de las adolescentes embarazadas son aquellas que por primera vez tuvieron relaciones, pero no se protegieron, debido a que no habían pensado tener una relación y la consecuencia fue el embarazo”, dijo.
Resaltó que son muchos los problemas que surgen cuando una adolescente queda embarazada, “lo más grave son las consecuencias hacia el bebé, nace en un ambiente hostil, porque no se tiene el apoyo de la pareja, un hogar en forma como se debe tener, lo que conlleva a que el desarrollo del menor tenga deficiencias o carencias”.
Manifestó que en el mejor de los casos “lo van a criar los abuelos, tal vez la madre adolescente en circunstancias difíciles, porque no está preparada ella ni psicológica ni económicamente para enfrentar una responsabilidad de ese tamaño”.
Además, se tiene la problemática en el entorno de la adolescente por la dificultad para concluir sus estudios, así como la complicación propia del embarazo debido a la inmadurez física de la misma.
“El simple hecho de un embarazo adolescente implica que va a ser por medio de cesárea, la cual dejará una cicatriz en el útero que complica embarazos posteriores”, expuso.
Señaló que en el IMSS se trata de contener los embarazos adolescentes mediante programas en la Clínica del Adolescente de las unidades de medicina familiar,
“Se imparte toda la información no sólo de metodología anticonceptiva sino en general de sus hábitos higiénicos y dietéticos, prevención de infecciones y enfermedades, así como la salud reproductiva y los derechos del adolescente”, manifestó.
Guadalajara, 4 Sep. (Notimex).