Numerosos estudios científicos han comprobado los beneficios de consumir vino regularmente, ya que es capaz de ayudar al corazón, de hacernos adelgazar, de reducir el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer o simplemente mantenernos sanos.

Compartimos contigo diez beneficios para la salud que sin duda constituyen una buena excusa para tomar una copa de vino:

1. Mejora la función cognitiva. Alrededor de 70 estudios demuestran que el consumo moderado de vino mejora el funcionamiento del cerebro y, en pequeñas cantidades, previene la demencia.

2. Aumenta el nivel de lipoproteínas de alta densidad HDL (colesterol bueno) en la sangre. Gracias a sus prolifenoles y flavonoides tiene un poder antioxidante, es decir, hace inofensivo el colesterol LDL (malo) al impedir su oxidación.

3. Aliado contra la grasa. El consumo de vino tinto activa la función de un gen que impide la formación de nuevas células de grasa y ayuda a movilizar las existentes, según estudio del Instituto Tecnológico de Massachusetts, por lo que contribuye a reducir la obesidad.

4. Reduce el riesgo de cáncer. Ayuda a reducir el riesgo de cáncer de pulmón en hombres, sobre todo si son fumadores. Además bloquea el crecimiento de las células responsables del cáncer de mama.

5. Evita la formación de coágulos al producir una acción anticoagulante; mejora la circulación de sangre en el cerebro y disminuye las inflamaciones.

6. Combate las bacterias bucales. Al parecer, algunos compuestos presentes en esta bebida frenan el crecimiento bucal de los estreptococos y bacterias vinculadas a las caries, además del de otros asociados a la gingivitis y dolores de garganta, según investigadores italianos.

7. Aliado del corazón. Una copa al día en el caso de las mujeres o dos en el de los hombres, contribuyen a aumentar los niveles de colesterol bueno en la sangre y previenen las complicaciones cardiovasculares.

8. Complemento placentero. Al degustarlo con moderación se liberan endorfinas en dos áreas del cerebro, aumentando la sensación de placer, de acuerdo con un estudio realizado en la Universidad de California.

9. Limpiador de paladar. Tomado durante la comida, el vino ayuda a percibir mejor los sabores que cuando ésta se acompaña con agua. Esto se debe a sus propiedades astringentes, que evitan la excesiva sensación de grasa y permiten degustar mejor la comida.

10. Hábitos saludables. Los aficionados del vino tinto suelen comprar alimentos más sanos y tener una dieta más equilibrada que los consumidores de cerveza. Consumen más aceitunas, frutas, verduras, quesos bajos en grasa, leche y carnes saludables.

Con información de El País