El fotógrafo Issui Enomoto ve el mundo a través de un lente inesperado: el parabrisas de un taxi.
Para la colección de Taxi in the Sea (Taxi en el Mar), el artista, que también es un taxista, muestra la ciudad de Yokohama con exposiciones múltiples, cada una capturada mientras busca pasajeros.
En la noche, la ciudad es iluminada con luces de colores que se prenden y apagan mientras los coches van por la carretera.
En una ciudad que nunca se desacelera, Enomoto congela el tiempo, preservando las vistas y los monumentos que desaparecen con el pasar del tráfico. Con frecuencia encontrarán una figura humana en el centro de las fotos, totalmente quietos, ya sea tomando una siesta en la calle, mandando un mensaje a un amigo o esperando al camión. Estas fotos van acompañadas de fotos barridas de la vida rápida industrial.
En la imaginación de Enomoto el tiempo esta comprimido en una sola imagen, todo el movimiento de la noche enfocado en un solo instante.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.