Quién iba a decir que una pequeña empresa familiar ubicada en Ordes (A Coruña) en 1959 derivaría en la increíble tienda insignia de la compañía en la actualidad. Un edificio del casco histórico de Santiago de Compostela -con más de 300 metros de espacio ajardinado y museo histórico incluído- ejerce de original boutique donde vanguardia y tradición conviven de la mano.

El concepto integral de empresa que permite acortar tiempos de respuesta al mercado y los altísimos sistemas de calidad utilizados se perfilan como claves del éxito.  No obstante,  ya se sabe que la última palabra siempre la tendrá el cliente: una mujer moderna que aún preocupada por la tendencia jamás renunciaría  a la calidad y comodidad.

Respecto a la fabricación, nos trasladamos a otro inmenso complejo industrial cuyas cifras hablan por sí solas: 14.000 metros cuadrados, 170 trabajadores, una producción anual de  800.000 prendas… y otros datos que suman y siguen, como una cartera de más de 1.000 clientes activos, 11 tiendas y franquicias sólo en Iberia y presencia internacional en 18 países.

(Forbes)