En lugar de intentar restaurar los asientos de manera que se vean igual que antes, Tatiane Freitas repara sillas rotas con acrílico translúcido. La serie se titula My Old New Chair y los resultados crean una ilusión óptica cautivadora.
El método de Tatiane es similar al kintsugi japonés. Trata la ruptura, pero también la incluye como parte del objeto en lugar de disfrazarlo.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.